La moderación es fundamental en todos los aspectos de la vida, y este no es la excepción
Por Amanda Díaz de Hoyo
Con Cannas
¿Se pueden combinar el cannabis y el vino? Desde que me certifiqué como paciente y supe que en California organizan experiencias de Wine and Weed, me comencé a cuestionar qué efectos podrían sentirse al combinar estas sustancias. Empecé a experimentar con algunas cepas mediante la microdosificación y el consumo controlado de vino.
Comencemos a desmenuzar el tema repasando los terpenos. Sabemos que los terpenos se encuentran en muchas plantas y emiten una gran variedad de aromas: florales, herbáceos, minerales, frutales, entre otros. Estos pueden detectarse con facilidad en el cannabis, la cerveza y el vino.
Las notas frutales de parcha, guayaba y piña se perciben con facilidad en el Sauvignon Blanc de Nueva Zelanda, y, de hecho, hay una cepa de sativa que se llama Passion Fruit.
En el caso del cannabis, los terpenos son clave para la emisión de aromas y sabores. Existen más de 100 terpenos que pueden crear sabores que van desde lo dulce, cítrico y balsámico hasta aromas de queso y notas de combustible. Estos también se encuentran en los vinos, y al unirse con otros compuestos como azúcares, ésteres, levaduras, pirazinas (compuestos químicos presentes en tallos y cáscaras que aportan toques herbáceos), tioles (compuestos que se forman durante la fermentación), lactonas (sustancias aromatizantes) y hasta la Botrytis cinerea (hongo conocido como “podredumbre noble” que afecta las uvas de cosecha tardía y otorga dulzor y complejidad a los vinos, especialmente los de postre), le otorgan una personalidad única al vino.
Hay investigaciones que indican que el CBD y el alcohol interactúan al consumirse juntos. El alcohol, ya sea fermentado como en los vinos o destilado como en otros espíritus, se considera un depresor del sistema nervioso central. El CBD se comporta de manera similar, pero en microdosis tiene efectos energizantes, mientras que en dosis más altas actúa como sedante.
Es común consumir cannabis junto con algún tipo de alcohol. El estudio titulado “Does Combination Matter? Examining the Influence of Alcohol and Cannabis Products Combination on Simultaneous Use and Consequences in Daily Life”, de Angela K. Stevens, Elizabeth R. Aston y otros investigadores, publicado en 2020 (onlinelibrary.wiley.com), señala que mezclar alcohol y cannabis simultáneamente tiene consecuencias de riesgo. Es interesante notar que el consumo de productos cannábicos como flor o concentrados se asocia con menor probabilidad de consecuencias negativas.
Esto se asemeja a la comparación entre la graduación alcohólica de un destilado, mucho más alta que la de una cerveza. Los hallazgos de este estudio coinciden con las estrategias de protección recomendadas: no mezclar productos alcohólicos y evitar el uso de cannabis junto con ellos.
¿Puede apreciarse el vino si usas cannabis? Aquí recurro a mi experiencia personal. Antes de continuar, recordemos que, al maridar vinos y comidas, rara vez encontramos dificultades, salvo en casos de alergias alimentarias. Desde que consumo cannabis, mi ingesta de alcohol ha disminuido significativamente, al igual que el consumo de medicamentos. Sin embargo, al microdosificar cannabis y luego consumir vino (sin que sea simultáneamente), mi apreciación organoléptica es más precisa y enriquecedora, permitiéndole experimentar sabores y aromas con mayor intensidad.
Reconozco que no todos reaccionamos de la misma manera, y que el control es esencial para disfrutar la experiencia. Es importante conocer de antemano los niveles de tolerancia tanto al cannabis como al vino, el método de consumo del primero y la moderación en ambos casos.
Al hablar del método de consumo, debemos considerar que no es lo mismo usar flor que concentrados o comestibles. La flor aporta notas quemadas, de tabaco y tostadas, que pueden resultar abrasivas. Los comestibles, al pasar por el sistema digestivo, tardan más en hacer efecto. En cambio, los concentrados permiten apreciar la pureza del sabor de los terpenos. En estos casos, no recomendaría el uso del bong.
La moderación es fundamental en todos los aspectos de la vida, y este no es la excepción. Tanto el cannabis como el vino deben consumirse con moderación. Prefiero usar cannabis microdosificado antes de degustar un vino. Lo peor es consumir mucho vino y luego usar cannabis, pues aumenta las probabilidades de experimentar lo que se conoce como “la pálida”. Consumir cannabis antes del vino permite un mayor control sobre la ingesta. Si nunca has experimentado esta combinación, te sugiero avanzar de forma gradual y analizar tus reacciones.
Con el tiempo, conocimiento y experiencia, comenzarás a percibir las sutilezas de los aromas, sabores y sensaciones. Por ejemplo, una cepa fuerte de índica combinada con un tinto puede favorecer la relajación, mientras que una cepa alta en sativa acompañada de un vino blanco puede ser ideal para socializar.