Las elecciones en Puerto Rico generan interés en la comunidad cannábica sobre la postura que los candidatos tienen de la planta
Se acercan las elecciones gubernamentales en Puerto Rico, despertando interés sobre qué piensan los candidatos en relación a cuestiones claves. En una región donde el cannabis es solo legal con receta médica, surge la duda de si continuará siendo así o si hay posibilidades de cambiar la legislación.
La principal disputa sobre la gobernación de Puerto Rico se da entre Jenniffer González, Jesús Manuel Ortiz y Juan Dalmau, quienes han exhibido un enfoque abierto hacia la regulación y el uso de la marihuana, aunque con diferencias en sus prioridades.
González es la actual comisionada residente de Puerto Rico en Washington DC y una defensora del desarrollo de la industria del cáñamo y el cannabis medicinal. En varias ocasiones, trabajó para asegurar la aprobación de fondos federales y la implementación de leyes que favorezcan la producción y comercialización de cáñamo en Puerto Rico.
Entre sus proyectos presentados se encuentra una legislación para proteger a los veteranos que trabajan en la industria del cannabis. Asimismo, anunció la aprobación federal de la producción de cáñamobajo el Programa de Producción de Cáñamo Doméstico de los Estados Unidos.
Por otra parte, Ortiz es el actual presidente de la Cámara de Representantes de Puerto Rico y muestra un enfoque progresista hacia el cannabis, particularmente en lo que respecta a la protección de los derechos de los pacientes medicinales.
En el ejercicio de sus funciones, apoyó las protecciones laborales para tales pacientes, promoviendo legislaciones que prohíban la discriminación en el lugar de trabajo basada en el uso de la marihuana.
En cuanto a Dalmau, que es senador por el Partido Independentista Puertorriqueño, tiene una postura clara a favor de la despenalización del uso de cannabis, enfatizando un enfoque de salud pública en lugar de uno punitivo.
En sus intervenciones, Dalmau ha subrayado la importancia de cómo atender el uso del cannabis: “Cuando se trata de uso para consumo personal, no debe ser tratado como el tema del negocio del narcotráfico, debe ser tratado desde un enfoque salubrista y, por lo tanto, requiere que haya una atención por parte del Estado para proveer unas herramientas desde psicólogos, médicos y trabajadores sociales”,indicó.
Los tres candidatos principales, en diferentes grados, están abiertos a la regulación y uso del cannabis y cáñamo. Pero todos coinciden en la necesidad de revisar y potencialmente expandir las políticas actuales relacionadas con la planta.