Por Revista Crónicas
Una encuesta reciente del Pew Research Center, llevada a cabo del 16 al 21 de enero de 2024 con 5,140 adultos en Estados Unidos, revela un fuerte apoyo a la legalización de la marihuana tanto para uso médico como recreativo.
A medida que más estados aprueban leyes para la legalización del cannabis recreativo, un 88% de los adultos estadounidenses cree que la marihuana debería ser legal para uno u otro uso.
Casi seis de cada diez estadounidenses (57%) opinan que la marihuana debería ser legal para fines médicos y recreativos, mientras que aproximadamente un tercio (32%) considera que solo debería ser legal para uso médico. Solo el 11% de la población piensa que el cannabis no debería ser legal bajo ninguna circunstancia.
Las opiniones sobre la legalización de la marihuana han cambiado poco en los últimos cinco años, según la encuesta. Sin embargo, existe una visión variada sobre los impactos de la legalización recreativa del cannabis. Alrededor de la mitad de los estadounidenses (52%) considera que legalizar el uso recreativo de la marihuana beneficia a las economías locales, y más adultos ven la legalización como un paso hacia la justicia penal más equitativa (42%) que injusta (18%).
Las opiniones están divididas en cuanto al impacto de la legalización recreativa en el consumo de otras drogas y la seguridad de las comunidades. Casi la misma cantidad de personas cree que aumenta (29%) como que disminuye (27%) el uso de otras drogas, mientras que más estadounidenses opinan que la legalización hace a las comunidades menos seguras (34%) en comparación con aquellos que creen que las hace más seguras (21%).
Existen diferencias partidistas significativas respecto al impacto de la legalización. La mayoría de los demócratas y los independientes con tendencia demócrata ven la legalización recreativa favorablemente en términos económicos (64%) y de justicia penal (58%). Por otro lado, menos republicanos y aquellos con tendencia republicana creen que la legalización tiene un efecto positivo en las economías locales (41%) y en el sistema de justicia penal (27%).
Las divisiones partidistas y demográficas persisten, aunque solo una pequeña proporción de adultos en distintos grupos demográficos se opone completamente a la legalización. Las opiniones varían significativamente por edad dentro de cada partido, con una mayor proporción de jóvenes republicanos y demócratas apoyando la legalización para uso médico y recreativo en comparación con sus contrapartes mayores.
La encuesta también revela diferencias por raza y etnia en las percepciones sobre los efectos de la legalización recreativa, especialmente en lo que respecta a la seguridad comunitaria y el uso de otras drogas. Mientras que amplias mayorías de todas las grupos raciales y étnicos ven impactos positivos en la economía y el sistema de justicia penal, los adultos hispanos y asiáticos son más propensos a percibir efectos negativos en la seguridad comunitaria y el incremento en el consumo de otras drogas en comparación con adultos blancos y negros.