Un estudio detalla las cifras del uso de cannabis por ocupación en 15 estados de los Estados Unidos y plantea interrogantes sobre la cultura laboral
En el mundo laboral de Estados Unidos, las diferencias en el consumo de cannabis son claras y, en algunos casos, sorprendentes. Un reciente estudio, basado en datos de más de 128,000 trabajadores en 15 estados entre 2016 y 2020, encontró que ciertas profesiones no solo lideran en prevalencia, sino que duplican el promedio general de consumo.
El sector de alimentos y servicios encabeza la lista: 21.9% de sus trabajadores admitieron haber consumido cannabis en los últimos 30 días, una cifra que lo coloca muy por encima de la media nacional del 10.7%.
El estudio, publicado en el American Journal of Public Health, clasificó las ocupaciones con mayores niveles de consumo:
- Preparación y servicio de alimentos: 21.9%.
- Artes, diseño, entretenimiento y medios: 17%.
- Construcción y extracción: 15.5%.
- Ventas y atención al cliente: 14.7%.
En el extremo opuesto, los sectores con menor prevalencia son:
- Profesionales de la salud: 4.7%.
- Educación y bibliotecas: 5.7%.
- Servicios de protección (como bomberos y policías): 4.4%.
Los datos apuntan a diferencias marcadas por las condiciones laborales. En el sector de alimentos y servicios, los horarios extensos, el bajo salario y el estrés podrían estar relacionados con esta tendencia.
Cuando se analiza por industrias, los patrones se repiten. El sector de alojamiento y servicios de alimentos lidera con un 20.7%, seguido por artes, entretenimiento y recreación (17.5%) y construcción (15.9%).
Por otro lado, sectores como la administración pública (3.7%) y las utilidades (3.4%) registran los niveles más bajos, probablemente debido a políticas más estrictas y pruebas de detección.
¿Consumo recreativo o medicinal?
Otro aspecto clave del estudio es que casi la mitad de los trabajadores que consumen cannabis lo hacen únicamente con fines recreativos (47%), mientras que un 20.8% lo utiliza exclusivamente con fines medicinales. El resto combina ambos usos.
¿Qué implicaciones tiene esto para las empresas?
En industrias de alto riesgo, como la construcción, el impacto del cannabis en las habilidades motoras y cognitivas es un tema de preocupación. Aunque el estudio no especificó si el consumo ocurre dentro o fuera del horario laboral, plantea la necesidad de políticas claras sobre el consumo y su relación con el desempeño y la seguridad.
Un cambio en la cultura laboral
Este análisis no solo refleja el aumento del uso de cannabis, sino también un cambio cultural en cómo se percibe su consumo. Con la legalización extendiéndose por más estados, la normalización del cannabis en la sociedad empieza a reflejarse en el ámbito laboral.
Para empresas y legisladores, estos datos son esenciales. La pregunta no es si los trabajadores usan cannabis, sino cómo equilibrar su derecho a consumirlo con la seguridad y productividad en el lugar de trabajo.
En ocupaciones que combinan creatividad y flexibilidad con largas horas y altos niveles de estrés, como las artes y los servicios de alimentos, el cannabis podría estar cumpliendo un rol clave. El desafío ahora será entender esta dinámica y responder de forma adecuada.