Investigación muestra cómo la estabilidad ambiental preserva los tricomas y maximiza la retención de terpenos
North Springfield, VT — Un estudio reciente dirigido por la Cannabis Research Coalition (CRC) revela que la clave para preservar la calidad del cannabis está en el control preciso del ambiente postcosecha. La investigación, que comparó la tecnología de secado desarrollada por Cannatrol con métodos tradicionales, encontró que la estabilidad en la presión de vapor evita daños en los tricomas y mejora la retención de terpenos, esenciales para el aroma y la potencia del producto.
Según los resultados, el sistema de Cannatrol logró una retención de terpenos 16% superior en comparación con los métodos convencionales de secado. Además, las flores tratadas con esta tecnología mostraron menos tricomas de color ámbar, un signo de envejecimiento prematuro que suele estar relacionado con la degradación de los cannabinoides.
“Con cada cosecha, mantener la presión de vapor estable garantiza que los tricomas no se dañen y que la flor conserve más terpenos”, explicó David Sandelman, director de tecnología y cofundador de Cannatrol. “Esto permite a los cultivadores entregar un cannabis superior en sabor, apariencia y efecto”.
El reto de evitar fluctuaciones ambientales
La investigación destacó que los cambios bruscos de temperatura y humedad en los métodos tradicionales de secado afectan directamente la calidad de la flor. En esos sistemas, la contracción y expansión del cutículo de los tricomas puede causar rupturas que aceleran la pérdida de compuestos volátiles, como los terpenos. En cambio, el sistema de Cannatrol mantiene un ambiente constante, minimizando el riesgo de oxidación y evitando la pérdida prematura de cannabinoides.
Para la doctora Allison Justice, directora de la CRC, esta investigación expone un vacío de conocimiento provocado por años de prohibición del cannabis. “Muchos métodos utilizados en la industria carecen de fundamento científico. La tecnología de Cannatrol ofrece a los cultivadores una ventaja al preservar mejor la calidad del producto, elevando los estándares del mercado”, afirmó.
Tecnología clave para un mercado exigente
El sistema de Cannatrol no solo permite un control completo del proceso de secado y curado, sino que también asegura resultados consistentes sin importar las condiciones climáticas externas. Esto da a los cultivadores mayor control sobre su producto final, eliminando riesgos asociados con la humedad estacional o variaciones de temperatura.
Con la creciente demanda de cannabis premium, la industria busca cada vez más procesos precisos y repetibles que garanticen productos consistentes y de alta calidad. Según Sandelman, el conocimiento científico sobre la fase postcosecha es la pieza que faltaba para optimizar el rendimiento de cada cosecha.
La CRC y Cannatrol se han comprometido a continuar investigando cómo mejorar la producción de cannabis a través del uso de herramientas avanzadas y datos científicos.