Por RevistaCronicas.com
Mastercard es la entidad financiera más reciente que le asesta un golpe a la industria de la marihuana. La compañía ha exigido a los bancos e instituciones financieras estadounidenses que dejen de permitir las compras de cannabis con sus tarjetas de débito, citando la ilegalidad federal de la marihuana en cartas de cese y desista enviadas la semana pasada a bancos y procesadores financieros.
“Cuando tuvimos conocimiento de este asunto, lo investigamos rápidamente”, dijo esta semana un portavoz de Mastercard.
“De acuerdo con nuestras políticas, dimos instrucciones a las instituciones financieras que ofrecen servicios de pago a los comerciantes de cannabis y los conectan a Mastercard para poner fin a la actividad. El gobierno federal considera ilegal la venta de cannabis, por lo que estas compras no están permitidas en nuestros sistemas”.
La marihuana medicinal es actualmente legal en 37 estados, con 21 estados que permiten el uso recreativo para adultos. El consumo de cannabis sigue siendo ilegal a nivel federal.
Aunque la mayoría de los dispensarios funcionan sólo con dinero en efectivo, algunos permiten a los clientes utilizar una tarjeta de débito con su PIN para comprar marihuana.
El sector del cannabis no se tomó bien la medida de Mastercard.
La empresa cannábica estadounidense Curaleaf dijo en un comunicado: “Las prohibiciones actuales sobre la banca en el cannabis son injustas para las comunidades, las fuerzas del orden, los trabajadores del cannabis y los propietarios de negocios”.
Actualmente, los servicios bancarios tradicionales están fuera del alcance de la industria del cannabis debido a la clasificación federal de la marihuana como una droga Categoría 1 – la misma categoría que la heroína y el LSD, sin uso o valor médico reconocido. En consecuencia, se ha prohibido a los bancos respaldados por la FDIC hacer negocios con dispensarios, cultivadores, distribuidores y otras empresas relacionadas con la marihuana que operan legalmente según las leyes estatales.
El bloqueo de Mastercard supone un reto para los negocios de la marihuana en EE.UU., dejando a los dispensarios luchando por encontrar opciones financieras alternativas ya de por sí limitadas. La industria del cannabis de alto riesgo, que opera principalmente en efectivo, sufrió un golpe el año pasado cuando Visa tomó medidas enérgicas contra los cajeros automáticos sin dinero en efectivo en los dispensarios, cerrando una solución popular para el sistema bancario.
Hawai es el primer estado en implementar las transacciones de marihuana sin dinero en efectivo, fomentando el uso de la aplicación de pago de débito CanPay para facilitar las ventas. California y Colorado se encuentran entre los estados que cuentan con la aplicación como opción para los consumidores de cannabis, según Prensa Asociada.
A nivel federal, la Ley de Banca Segura y de Aplicación Justa pretende liberar los servicios bancarios para la industria del cannabis. El proyecto de ley bipartidista busca proteger a los bancos de trabajar con negocios legales de cannabis y protegerlos de la penalización federal, informó CNBC.
En medio de los esfuerzos estatales y federales para establecer un medio de transacción más cómodo, la industria del cannabis puede tener que depender por ahora del dinero en efectivo, un método que plantea riesgos de robo y blanqueo de dinero.
