Por la cantidad de estudios sobre el tema, no es exagerado decir que el CBD ayuda a controlar la ansiedad. Incluso se ha demostrado que el uso de aceite de cáñamo muestra resultados positivos en comparación con los grupos de placebo.
Un estudio del 2017 ha descubierto que 300 mg es una dosis diaria óptima de cannabidiol para la mayoría de lxs pacientes. Sin embargo, también se ha descubierto que hasta un 15% no respondería a esa dosis. Algunos pacientes sentirían mejoras tras 40 mg de cannabidiol, y otros experimentarían efectos adversos tras la dosis de 300 mg.
Ahora mismo, no hay consenso sobre el tema: la dosis se determina mejor individualmente bajo la supervisión del médico. Los pacientes también tienen que entender que el CBD no funciona inmediatamente y que se necesita algún tiempo antes de que sus propiedades surtan efecto. Por eso no se recomienda aumentar la dosis si no se sienten los efectos inmediatamente.
Fuente: AskGrowers