Redacción Crónicas, 7 de julio de 2021 – Desde que comenzó la pandemia, la industria del cannabis encara serias dificultades a la hora de ocupar puestos de trabajo.
Un ejemplo de estos es Vangst, el mayor reclutador de cannabis en los Estados Unidos que actualmente no logra cubrir más de 200 puestos vacantes en su plataforma de trabajo temporero.
¿Acaso será que los beneficios del desempleo resultan mejor que la paga en la industria?
Para contestar esta pregunta, la revista Forbes entrevistó en exclusiva a la directora de asociaciones comunitarias de Vangst, Kelsea Appelbaum.
“El país todavía se está recuperando de la pandemia, y uno de los efectos duraderos en lo que respecta al empleo es que los puestos con salarios bajos aún son difíciles de cubrir debido a los beneficios por desempleo que reciben las personas. Este desafío también ha afectado a la industria del cannabis, pero estamos viendo que las cosas comienzan a volver a la normalidad”, contestó Appelbaum.
Además, añadió que los mayores desafíos en la industria del cannabis se encuentran en los puestos que son mal pagos, sobre todo los puestos de cobradores, podadores y técnicos de cultivo.
“Este desafío existe casi exclusivamente en puestos de menor nivel o con salarios bajos debido a los beneficios de desempleo que existen en este momento. Casi todos los demás puestos en el ámbito del cannabis siguen teniendo un gran interés por parte de los candidatos, especialmente después de que la industria se considerara ‘esencial’ durante la pandemia”, añadió.
Sin embargo, Appelbuam reconoció que hace unos años era raro encontrar una empresa que ofreciera beneficios competitivos. Pero en la actualidad, la empresaria asegura que las empresas de cannabis entienden que para atraer talentos de primer nivel, deben enfocar su mirada en los beneficios económicos ya que es un factor importante para continuar levantando la creciente industria del cannabis.