Por Némesis Mora Pérez
Para Revista Crónicas
Como parte de la conmemoración de los solados caídos durante la guerra, mejor conocido como el Día de la Recordación o ‘Memorial Day’ en los Estados Unidos, el presidente del Capítulo de Veteranos Pro-Cannabis Medicinal en Puerto Rico, Juan Alicea, invitó a la comunidad de veteranos a orientarse sobre los beneficios para la salud del cannabis y así dejar a un lado los estigmas que giran en torno al consumo de la planta.
“Muchos de los veteranos que pudimos regresar de los diferentes escenarios de guerra, estamos muertos en vida y estamos sufriendo todavía. Los flashbacks (recuerdos) de la guerra no son fáciles. Hay veces que uno piensa que era mejor estar extendido seis pies bajo tierra que estar con los traumas que tenemos ahora, porque esto hay que vivirlo diariamente. Nadie sabe lo que uno camina hasta que está en los zapatos de la otra persona”, explicó Alicea.
Actualmente, el Departamento de Salud solo cuenta con 92 veteranos registrados como pacientes de cannabis medicinal, dijo Alicea. Sin embargo, asegura que son muchos más los veteranos que consumen este medicamento en la isla.
“Estamos viendo que los veteranos no se están identificando como veteranos por miedo. Muchos piensan que se les va a quitar la pensión, pero legalmente no es así, ya que hay leyes que los protegen. Los veteranos no se están orientando lo suficiente y la Administración de Veteranos tampoco está haciendo su parte de informarle a los veteranos sobre el cannabis medicinal”, explicó el presidente de la organización Capítulo de Veteranos Pro-Cannabis en la isla.
Entre las condiciones debilitantes que establece el reglamento para el consumo de cannabis en Puerto Rico, se encuentra el Síndrome de Estrés Postraumático (PTSD, por sus siglas en ingles), una enfermedad altamente asociada a los militares que han participado en misiones internacionales.
Según Alicea, el consumo de cannabis “lo ha ayudado increíblemente” a trabajar con los síntomas del PTSD.
“La mayoría de veteranos sufrimos del mismo problema de PTSD. A mí me diagnosticaron un 70% de PTSD y debo decir que el cannabis me ayuda…Hace poco más de tres años que lo llevo utilizando y logré controlar la presión y la diabetes. Modifiqué mi dieta y de 18 pastillas que tomaba para la diabetes, ya no tomo ni una. Me siento mucho mejor de salud”, concluyó Alicea.