Por Richard Huntley
¿Cómo debe oler y cómo debe verse la flor de cannabis? Aquí les comparto tres consejos para la próxima vez que vayan a su dispensario a comprar cannabis medicinal.
1. La primera impresión – Todo el mundo habla de lo importante que es causar una buena impresión, y el cannabis no es la excepción. Por eso es importante ir a un dispensario reconocido y de confianza. Aquí típicamente ya el dispensario ha separado las mejores flores para el paciente. Con esto dicho, hay factores que verdaderamente nos indican la calidad del producto: la genética de la flor, quién la cultivó, si los “trimmers” tenían experiencia, por cuánto tiempo se curó la flor y el trato que tuvo la flor antes de llegar a sus manos.
La mejor flor típicamente no tiene hojas. El color de la flor no debe ser marrón oscuro o amarillo y la biomasa será densa. Los pistilos no deben ser blancos, en vez, tendrán un color marrón maduro. Y, por supuesto, la flor debe ser “sin semilla”. Recuerden que no todas las variedades de flores se verán igual. Normalmente una “kush” o índica-dominante será de menor tamaño y bien densa, mientras que una “haze” o sativa-dominante puede ser más alargada. Es importante recordar que cada persona es diferente y reacciona de manera diferente a las variedades de flores y sus derivados.
2. El aroma y sus características globales – A menudo la gente piensa que una buena flor es “apestosa” (tiene un olor fuerte). Pero es mucho más que eso. La planta de cannabis es una flor única. La planta posee grupos de terpenos por naturaleza para atraer a los seres humanos, animales e insectos.
Hoy en día, el mercado está dominado por extractos y cartuchos de vaporización (que en ocasiones carecen de terpenos naturales de la planta y, por lo tanto, del olor). Pero aun así la flor es la más deseada y solo se hace más popular a medida que la sociedad favorece su consumo.
Cuando vaya a evaluar una cepa, preste atención a la complejidad de su olor. Quizás su aroma cae bajo afrutado, floral, terroso, entre otros. O, mejor aún, tal vez tiene una combinación más compleja que no se identifica fácilmente. Hay una gran variedad de sabores y aromas que se encuentran en la flor. La intensidad y la longevidad de un aroma es un fiel reflejo de cómo probará la flor.
Una flor mal cultivada y seca tendrá un aroma que no es agradable al olfato y probablemente sabrá a materia de planta. Las cosechas que han sido cultivadas muy temprano tendrán un olor terroso, a base de clorofila y generalmente serán blandas o incapaces de “romper” fácilmente. Se debe evitar comprar flores húmedas, especialmente porque será una pérdida de tiempo y dinero.
3. El sabor y la infusión de terpenos – Esto es lo que mejora o daña una experiencia. Después de escoger un aroma atractivo, el sabor complementará dicho aroma con un cóctel único de terpenos tal y como lo haría una buena copa de vino fino. Soplando su flor sin haberla vaporizado, se revelará la intensidad del perfil del sabor que va a obtener.
Después de calentar la flor, inhale por un tiempo prolongado para que disfrute del sabor que resonará en su boca durante un corto tiempo. Lamiendo los labios cuando usted respira también revela la profundidad del sabor de la cepa, mientras que al exhalar hará hincapié en la riquezas degustando su flor de una manera diferente. Esta flor maravillosa puede mostrar una amplia gama de sabores, gracias a sus terpenos, que puede ser afrutados, picantes, terrosos, aromatizados, florales, y así sucesivamente.
Espero que estas sugerencias le ayuden en la búsqueda de la flor que más le agrade y contribuya a sus tratamientos.
El autor es propietario de High Grade Hydroponics (939) 338-0757 richard@high-gradehydro.com