Río de Janeiro, 22 ene (EFE) – El Gobierno brasileño anunció una serie de medidas para facilitar la importación de medicinas a base de canabidiol, uno de los principios activos extraídos de la marihuana, ante el aumento de la demanda por las mismas y al largo tiempo que tenían que esperar los pacientes.
La flexibilización fue determinada por la Agencia Nacional de Vigilancia Sanitaria (Anvisa), órgano vinculado al Ministerio de Salud, en un decreto en el que limitó las exigencias para importar las medicinas con base en canabidiol tan sólo a la presentación de la prescripción médica.
Hasta ahora los brasileños con enfermedades tratadas con estas medicinas podían importarlas, ya que su comercialización y producción sigue prohibida en el país, pero para ello tenían que presentar varios documentos, como un informe médico describiendo la enfermedad, un estudio sobre los beneficios del remedio deseado y hasta un término responsabilizándose por la compra.
Con la nueva reglamentación, la Anvisa autorizará la importación así que el paciente presente la prescripción médica en un portal de servicios gubernamentales disponible en internet.
La agencia reguladora igualmente elevó de uno a dos años la validez de la autorización expedida para la importación.
El director presidente del organismo, Antonio Barra, explicó que las medidas buscan reducir el tiempo que tenía que esperar los pacientes para importar las medicinas, lo que puede perjudicar el tratamiento, así como atender una necesidad surgida ante el aumento de la demanda por los productos con canabidiol.
Los pacientes tenían que esperar unos 75 días para que la Anvisa les concediera la autorización de importación.
“No sabemos cuánto se reducirá ese tiempo pero esperamos una disminución muy significativa”, dijo Barra, quien admitió que el largo tiempo de espera “puede perjudicar el tratamiento y provocar daños irreparables en la salud de las personas”.
Desde que la importación fue autorizada, en 2015, la Anvisa ya expidió 13,863 autorizaciones de ingreso de las medicinas a Brasil solicitadas por 9,540 pacientes.
Mientras que en 2015 fueron concedidas 902 autorizaciones, ese número llegó a 3,613 en 2018 y a 6,276 hasta octubre del año pasado.
En diciembre pasado la Anvisa aprobó una serie de medidas que permiten la futura venta de productos a base de marihuana en las farmacias del país, pero que siguen vetando expresamente el cultivo de la planta en Brasil por parte de empresas interesadas en investigar el uso medicinal de la planta o en producir medicinas.
La restricción fue impuesta por decisión del Gobierno del presidente brasileño, el líder ultraderechista Jair Bolsonari, que considera que la autorización del cultivo de marihuana para fines medicinales representa un primer paso para legalizarla en Brasil.
Por ahora se desconoce cuándo las farmacias comenzarán a ofrecer medicinas derivadas de la marihuana en el país, pero la Anvisa trabaja con la previsión de que los distribuidores interesados presenten en marzo las primeras peticiones de registro de los respectivos productos en Brasil.
Hasta entonces los pacientes que necesiten tratarse con tales medicinas tendrán que seguir importándolas por cuenta propia.
Las medicinas que usan principios activos de la marihuana, como canabidiol o tetrahidrocanabidiol (THC), son recomendadas en Brasil para tratamientos para enfermedades como epilepsia, esclerosis múltiple, autismo, dolor crónico y mal de Parkinson.
Brasil tan sólo incluyó la Cannabis sativa (marihuana) en su lista de plantas medicinales en 2017.
Pese a la mayor aceptación del uso medicinal de la planta, en Brasil la ley aún castiga con cárcel el cultivo, la comercialización, la posesión y el consumo de marihuana.