Por José E. Maldonado
Revista Crónicas
Los pacientes de cannabis medicinal en Puerto Rico cada vez cuentan con una mayor gama de flores y productos de calidad para tratar su condiciones crónicas. Todos surgen de una materia básica prima: la planta de cannabis. En la isla, 23 empresas están certificados actualmente para cultivar cannabis medicinal bajo los más altos estándares de calidad que se rigen por estrictos reglamentos y parámetros de laboratorios especializados. Varias otras compañías han solicitado la licencia para el establecimiento de cultivos, lo que además de ayudar a la salud de la población, aporta al desarrollo económico y la creación de empleos.
“El cannabis medicinal es una industria en crecimiento y con mucho potencial. Somos una isla pequeña pero con un mercado potencial grande. Cuando hablamos del cultivo, a veces solo pensamos en las flores, pero es mucho más que eso. La flor de alta calidad es la base para la manufactura de comestibles, aceites y todas las demás opciones disponibles para que el paciente reciba su tratamiento,” Luis Garrido, profesor de buenas prácticas agrícolas y manufactura de Cannaworks, firma que ofrece entrenamientos y certificación a la industria.
Todo producto disponible en un dispensario debe ser manufacturado localmente utilizando flores de los cultivos alrededor de la isla. Excepto uno, todos son cultivos en interiores – en su mayoría en instalaciones remodeladas y reactivadas de la Compañía de Fomento Industrial -, lo que permite un mejor control de hongos, humedad y plagas.
“Una de las cosas que nos caracteriza es la limpieza. Tenemos unas cepas bien altas en THC y no tenemos ningún tipo de hongo, plagas o bacterias, lo que es importante porque nos consideramos una farmacéutica, no un cultivo regular”, explica Julio César López Vélez, director de Operaciones y Cultivo de Anani Medical Pharma en Cidra.
Los cultivos operan con protocolos de calidad al estilo de las farmacéuticas tradicionales, lo que asegura una agricultura limpia y con mucho protocolo y seguridad.
“En el corto tiempo que tiene esta industria, Puerto Rico ha dado grandes y pasos y está cosechando flores de gran calidad. No importa el cultivo que sea, si su flor o producto está en un dispensario disponible para el paciente, es porque pasó las pruebas de laboratorio y tiene la calidad necesaria para el consumo”, dijo Garrido.
Competencia de calidad
La fuerte competencia en esta industria incipiente ha resultado en que cada cultivo quiera producir la mejor flor posible, y mirando al futuro, están desarrollando cepas con genéticas propias para atender condiciones de salud particulares.
Ejemplo de esto es Advance Logistics (Herbman) en Ciales, que trabaja sobre 350 cepas entre su banco de semillas y madres germinadas, para desarrollar muchas combinaciones de THC y CBD de diferentes proporciones, además de cepas 100% sativa e índicas y los diferentes tipos de híbridos.
“Lo que buscamos es desarrollar cepas específicas para tratar condiciones particulares de salud para mejorar la calidad de vida de los pacientes”, dijo el director de esa empresa, que cuenta con un equipo de 25 empleados en sus instalaciones, que en el pasado albergaron una fábrica de ropa interior.
Advanced Logistics utiliza estas flores para manufacturar concentrados de gran calidad, aceites, comestibles y otros productos que están en gran demanda.
En el caso de FarmaVerde en Bayamón, la empresa emplea “las prácticas y métodos más innovadores para cultivar cannabis saludable. Nuestro equipo de trabajo consta de personas muy conocedoras tanto de cultivar cannabis como del cultivar frutas, vegetales y plantas medicinales”.
“La horticultura de plantas que se destinan para consumo humano tiene que realizarse de una manera concienzuda, sustentable y amigable con el medio ambiente”.
Agrónomo Raúl Mari, director de Cultivo de FarmaVerde
“Nuestro equipo de trabajo cuenta con vasta experiencia y conocimientos que se aplican para cultivar nuestras cepas distinguidas de Mango Kush, BlackWater, Banana y Papaya Punch, entre otras variedades con altas propiedades medicinales”, agregó Mari, quien cuenta con sobre 20 años manejando cultivos de plantas medicinales
De hecho, FarmaVerde ha desarrollado Cannatonic, una cepa ideal para personas que recién comienzan sus respectivos tratamientos ya que siempre tiene características que reducen la euforia causada por el THC en el paciente.
Libres de pesticidas
Mientras, cultivos como los de IMC (tumedicina) en Ponce y Moca no utilizan pesticidas y están incorporando prácticas de sustentabilidad para el reuso de tierra y otros componentes de la producción para minimizar su impacto ambiental.
“En nuestro caso, somos los únicos certificados como ‘Clean Green’, que significa que usamos métodos orgánicos para que todos los nutrientes utilizados sean naturales y libres de químicos para no comprometer el sistema inmunológico de los pacientes con otros factores”, dijo Annette Ramos, directora de Operaciones de IMC (tumedicina).
“Somos bien cuidadosos en los métodos que utilizamos para cultivar y ese elemento orgánico es bien importante para asegurarle al paciente que esa planta ha sido tratada con métodos que proveen los mejores efectos posibles”, agregó.
Generador de empleos
A pesar de que no hay estadísticas actualizadas disponibles, se estima que actualmente se cosechan unos 200,000 pies cuadrados de cannabis medicinal en la Isla. Mientras estos se expanden, continúan aportando miles de empleos directos e indirectos para personas de todas las edades, pero en su mayoría jóvenes. Estos usualmente comienzan a laborar como podadores (“trimmers”) y a medida que adquieren experiencia realizan otras funciones más sofisticadas en las siembras.
“Esta una industria nueva, por lo que en los cultivos tenemos que cubrir distintas bases, desde ingenieros hasta técnicos de cultivo y agrónomos especializados hasta los abogados y contables que dan servicios de apoyo a nuestra operación”, dijo Ramos.
Para los operadores de cultivo, la pasión, dedicación y ganas de aprender y seguir los protocolos y reglas establecidos son las cualidades indispensable de un trabajador de cultivo.
Todos los entrevistados coincidieron en que la calidad de las cosechas de cannabis en Puerto Rico está a un nivel muy competitivo en comparación con los otros estados en los que hay programas de cannabis medicinal o se permite el uso recreativo.
“Basado en mi experiencia, puedo decir que en la isla estamos mucho más adelantados que estados que llevan 18 o 20 años en la industria, porque aquí hemos establecido controles bien rigurosos que ahora es que se están aplicando en lugares como California. Hemos dado un paso adelante en ese sentido, y de ahí la excelente calidad de las flores que estamos produciendo en este mercado”, concluyó Garrido de Cannaworks.