San Juan (EFEUSA) – Agencias de seguridad, por orden de la Fiscalía federal, detuvieron a 33 personas en el sur de Puerto Rico en una operación contra el narcotráfico en la que se desmanteló una red que para su distribución metía la droga en envases de cannabis medicinal con el objetivo de engañar a las autoridades.
La jefa de la Fiscalía federal en San Juan, Rosa Emilia Rodríguez, informó este jueves en conferencia de prensa de que fueron detenidas, hasta el momento, 33 personas sobre una orden de arresto de 50 individuos.
Las detenciones se efectuaron en una operación llevada a cabo durante esta madrugada para terminar con la actividad de una organización que operaba desde 2013 en los residenciales José Gándara y Hogares de Portugués de Ponce, la principal ciudad del sur de la isla.
Las autoridades no dieron una cifra exacta de la cuantía de la actividad de esta organización, aunque fue indicado las operaciones delictivas generaban millones de dólares.
Los detenidos se enfrentan a cargos por conspiración con el objetivo de distribuir droga.
Rodríguez identificó a los líderes de la banda como Christopher Román “Keke” y Víctor Torres “Manuel Silva”, tal y como era conocidos coloquialmente.
Además de los 33 detenidos en el sur de Puerto Rico, seis fueron ya arrestados en Estados Unidos y siete más estaban en prisión.
La fiscal María Montañez explicó que la organización recreaba etiquetas de medicinas o cannabis medicinal para introducir la droga en envases, para lo que se valían de impresoras y equipos de diseño.
Miembros de la organización criminal colocaban candados en los portones de los residenciales públicos para obstaculizar la entrada de la Policía.
Además, la banda criminal obligaba a personas que vivían en los residenciales a seguir sus órdenes, ya que de lo contrario recibían represalias.
Los miembros de la banda organizaban reuniones para discutir las actividades a seguir.
Los detenidos se exponen a sentencias que van de los diez años de prisión a cadena perpetua, según indicó Rodríguez.
Dieciséis de los acusados enfrentan cargos por posesión de armas durante la comisión de un delito de narcotráfico.
El secretario de Seguridad Pública del Gobierno de Puerto Rico, Elmer Román, dijo que el éxito de la operación se basó en la colaboración que llevan a cabo en la isla caribeña todas las agencias relacionadas con el orden público.
“La colaboración ha dado resultado”, destacó el funcionario, tras subrayar que existe un compromiso de trabajo para mejorar todavía más la colaboración.
El director del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE, en inglés), Iván Arvelo, dijo por su parte que las personas que viven en residenciales públicos no merecían sufrir esta situación.
Los arrestos fueron efectuados por agentes del Servicio de Inmigración y Aduanas (ICE, por sus siglas en inglés), el Negociado Federal Antidrogas (DEA), de la Oficina de los Alguaciles Federales y la Policía de Puerto Rico.
Los detenidos serán llevados en una vista inicial ante el magistrado federal Marcos López.
Puerto Rico es utilizado por las organizaciones de narcotráfico internacional para introducir en territorio de Estados Unidos drogas y en especial cocaína, ya que una vez superada la frontera del Estado Libre Asociado es mucho más sencillo acceder a territorio continental de EE.UU. sin tener que pasar apenas controles.
Una parte de la droga que se dirige a Estados Unidos se queda en territorio puertorriqueño, donde es distribuida por bandas de delincuentes locales, que se disputan los puntos de venta de droga a punta de pistola, causa de un elevado número de muertes en las calles de la isla caribeña.