Los Ángeles (EFE) – Vapores químicos tóxicos, y no la presencia de lípidos en los pulmones, son los responsables del daño causado por cigarrillos electrónicos, según un informe de la Clínica Mayo presentado este miércoles como el primer estudio de tejidos de pulmón con pacientes enfermos por el vapeo.
La investigación no encontró prueba de acumulación de lípidos -sustancias grasosas, como aceites minerales- en pulmones, un factor que se ha tenido como posible causa del daño por el uso de cigarrillos electrónicos.
Se analizaron biopsias realizadas a 17 pacientes, todos usuarios de tales cigarrillos, que presentaban lesiones pulmonares posiblemente relacionadas con el vapeo.
“Aunque no podemos descontar el papel potencial de los lípidos, no hemos visto nada que sugiera que (el daño) sea un problema causado por la acumulación de lípido en los pulmones”, señaló Brandon Larsen, cirujano patólogo de la Clínica Mayo Arizona y experto nacional en patología del pulmón.
En lugar de los lípidos, “parece ser algún tipo de lesión química directa, similar a lo que podemos ver con las exposiciones a humos químicos tóxicos, gases venenosos o agentes tóxicos”, agregó Larsen, autor principal del estudio.
De las 17 muestras de tejido analizadas, dos correspondían a Arizona y las otras a diferentes estados del país, detalló el informe, que se refirió a los efectos del vapeo como “una crisis de salud pública”.
Todos los pacientes reportaron el uso de cigarrillos electrónicos y el 71 % confirmó haber utilizado aceites de cannabis. Todos, igualmente, presentaron lesión pulmonar aguda, incluyendo neumonitis. Se anota en el reporte que dos de ellos murieron.
Las autoridades de Salud del país han informado sobre más de 800 casos de lesiones pulmonares asociadas con el uso de los cigarrillos electrónicos en los pasados meses, de acuerdo con este reporte.
Hasta la fecha, han sido confirmadas por los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) 12 muertes en 10 estados del país.
Las investigaciones sobre el tema han sugerido que productos que contienen THC (tetrahidrocannabinol), el principal componente psicoactivo de la marihuana, u otros aceites de cannabis como el cannabidiol, pudieron desempeñar un papel importante en estos decesos.
“Nuestro estudio ofrece la primera revisión detallada de las anormalidades que pueden observarse en biopsias de pulmón, para ayudar a los médicos y a los patólogos a realizar un diagnóstico en un contexto clínico apropiado”, indicó Larsen.